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Tipos de cortinas de teatro

Los cortinas de teatro también se encuentran entre las cortinas de gama alta. La experiencia teatral es cualquier cosa menos corriente. Ni a la vista ni al oído. No es algo que pueda sustituirse por pantallas. La experiencia personal es más importante que cualquier otra cosa, y más elocuente que cualquier otra cosa. Para crear este entorno, a menudo sobrecogedor, hay que cumplir una serie de requisitos. No es de extrañar que la creación de una acústica profesional sea uno de estos requisitos. En este caso, no se trata de una cuestión de acústica satisfactoria, sino de profesionalidad. Porque hasta el más inexperto puede oír la diferencia entre calidad e indiferencia.

¿Cuándo entra en juego el telón del teatro?

El telón no sólo señala el final de la representación. En un porcentaje significativo de casos, su papel es más importante. El material opaco, fonoabsorbente e ignífugo es la base, y realmente cumple todos los requisitos. La variación de cortina de teatro en terciopelo escénico es una elección excelente. Está disponible en una amplia gama de tamaños y colores, para que pueda adaptar su aspecto a la escenografía específica del escenario.
La muselina escénica es sin duda la opción ideal. Fabricado en algodón, es insonorizante, opaco y altamente ignífugo, por lo que resulta ideal para cortinas escénicas. Como cumple todas las normas de seguridad contra incendios, es decir, tiene una baja inflamabilidad, puede utilizarse incluso en zonas públicas sin problemas. El cumplimiento y la aplicación de la normativa contra incendios es una prioridad en cualquier circunstancia. En grandes espacios y habitaciones, es un complemento realmente espectacular. Así que puede desempeñar un papel importante no sólo en la absorción del sonido, sino también en el apoyo al mundo visual. La superficie ligeramente brillante, por ejemplo, confiere un aspecto elegante. Con una selección de tamaños estándar, es fácil elegir el que cumpla todos los requisitos del lugar.
En el mundo del teatro, la espontaneidad y la improvisación desempeñan un papel fundamental. Por supuesto, también es posible adaptar el tamaño de las cortinas, que contribuyen en gran medida al aspecto escénico, a diseños absolutamente individuales.

¿El telón de teatro como cúspide de la multifuncionalidad?

¡Sí! No basta con que sirva para mejorar el sonido de forma fácil y eficaz, es sólo un aspecto de su aplicación. Pero como elemento escénico, como atrezzo, también tiene una gran importancia, ya que puede pasar a formar parte del fondo. En otras palabras, puede aportar a una escena, o a toda la obra, su belleza y su aspecto. El molletón negro es el más clásico, pero obviamente todos los parámetros, incluido el tono de color, pueden modificarse individualmente, según las necesidades.
Las producciones al aire libre o semicubiertas son muy diferentes de las de interior. Al mismo tiempo, la calidad del sonido también puede ser el cielo y la tierra. Así pues, es realmente el diseño situacional el que garantiza la mayor eficacia y pertinencia.
Lo que no debe comprometerse bajo ningún concepto es la máxima funcionalidad, por un lado, y el cumplimiento de la normativa de seguridad contra incendios, por otro. El escenario está iluminado por decenas de focos. Poca gente lo sabe, pero el aire también se calienta considerablemente. Por eso, los textiles como las cortinas, que siempre están presentes, deben ser capaces de soportar el calor.

Telones de teatro

¿Cuánto puede aportar el suntuoso sonido al éxito de la obra?

En una cantidad inexpresable. Concretamente, es una cuestión de credibilidad. Si los espectadores consideran que lo que oyen, o cómo lo oyen, es perturbador para sus oídos, entonces la decepción, e incluso la insatisfacción legítima, son inevitables. Entonces, lo primero que surge es que la propia empresa no es de fiar porque no proporciona el tipo de entorno en el que se crean las mejores condiciones posibles para crear la experiencia perfecta. Un mal sonido puede restar magia a una actuación, y quitársela para siempre. Y cuando esto ocurre, por muy brillante que sea la obra, por muy famosos mundialmente que sean los actores, el efecto global no puede alcanzar un nivel capaz de anular la experiencia negativa.
Así que el telón teatral puede añadir cantidades incalculables a la complejidad, el tipo de satisfacción que alimenta la autenticidad, y cuyo valor real es inestimable. Es incomparable con el grado de inversión que supondría comprar una cortina.
Además, es el tipo de compra que se amortiza con creces. De hecho, podrás disfrutar de sus ventajas desde el primer momento, tanto desde el punto de vista visual como sonoro. Pero, este tipo de satisfacción puede hacerse más profunda con el paso del tiempo. Por su parte, la robustez del telón de teatro le permite resistir las arrugas y los desafíos y cumplir plenamente su «cometido». Puede parecer que se trata sólo de un accesorio escénico, pero en realidad puede utilizarse en innumerables teatros.